El Juzgado de Instrucción número 4 de Tarragona ha archivado la querella presentada por el Nàstic de Tarragona contra el árbitro vizcaíno Eder Mallo Fernández, colegiado que dirigió el partido de vuelta de la final por el ascenso ante el Málaga CF. El club catalán acusaba al colegiado de presunta corrupción deportiva y falsedad documental por las decisiones tomadas durante su actuación en el partido que les enfrentó a los malagueños y concluyó con 2-2, significando el ascenso del conjunto entrenado por Sergio Pellicer. La entidad catalana se basó en los informes elaborados por un detective privado y un exárbitro de Primera División para querellarse contra el colegiado vasco adscrito al colegio castellanoleonés.
El Nàstic de Tarragona se sintió perjudicado en aquel encuentro celebrado en Tarragona tras un frustrado ascenso que vio como se le escapaba de las manos cuando vencía por 2-0. Los goles de Dioni y de Antoñito Cordero (en el famoso minuto 122) dieron el ascenso a la categoría de plata del fútbol español a los malacitanos. El colegiado bilbaíno subrayó en el acta arbitral que llegó a temer por su “integridad física, al ver cómo aficionados abrían la puerta”. Hay que recordar que Eder Mallo Fernández se vio obligado a detener el partido durante cinco minutos por el constante lanzamiento de objetos y balones al terreno de juego.
Las pruebas aportadas por el Nàstic de Tarragona han sido desestimadas por la Justicia. El club catalán se basó en grabaciones realizadas por la agencia de detectives Método 3. En el informe del detective privado se podían leer consideraciones como que el árbitro “denota un perfil anticatalán muy importante”. En la querella se le acusó a Eder Mallo de pitar de forma premeditada para favorecer al Málaga y asegurarse de este modo su ascenso como colegiado de Segunda División, algo totalmente infundado.
Además, los insultos y amenazas que describió el árbitro en el acta fueron el principal argumento para que la Federación Española de Fútbol sancionase al Nàstic con el cierre de su estadio durante cuatro partidos.
Tras el archivo de la querella presentada contra Eder Mallo, el Nàstic de Tarragona podría recurrir la decisión del juzgado y alargar aún más el culebrón de aquel partido que quedará siempre en el recuerdo por aquel famoso minuto 122 en el que el Málaga CF logró el 2-2 que supuso un ansiado y merecido ascenso para retornar a la Segunda División.
